Corazón Testarudo
Y yo que creí que habíamos hecho las paces. Que por fin había entendido que tenía que escucharme atentamente antes de actuar. Que ya le permití una vez mandarse sólo y todo resultó mal, tal como se lo predije desde un principio. “Nunca más,” me prometió. Pero, no. Este corazón testarudo no aprende. Ni quiere aprender.
Que quede constancia: le estoy diciendo que no... Pero hace rato que me dejó de escuchar.
Que quede constancia: le estoy diciendo que no... Pero hace rato que me dejó de escuchar.
8 Comments:
Por lo que yo sé, no hay nada más traicionero que un corazón. Te juegan chueco, llegan encogidos y te prometen "nunca más" y uno siempre les cree. No te gastes, no le digas nada, porque nunca te va a escuchar. Mejor prepara un plan B, una estrategia que te permita prepararte para lo que viene, tirarte a la piscina para lo inevitable...
Buen consejo Natita, pero tengo la esperanza de convencerlo (antes ya le he ganado).
De hecho, estamos en pleno proceso de negociación.
¡No quiero un plan B!
...estaba ahí tendida en el sofá con la mirada fija en el techo y el corazón abierto, entonces dijo:
- Es que tengo miedo
- ¿Miedo a qué?
- No sé bien a qué... tal vez a perder mi independencia, a compartir todos los espacios, todos los minutos, a que todo cambie mucho. A equivocarme... otra vez
- ¿Por qué?
- No sé. Es sólo miedo.
Pensé en ese momento que ése podría ser el peor de los miedos, temer a las cosas que te está ofreciendo el cielo y las rechaces, temor a escuchar al corazón. Habría preferido que me hubiera contestado
- A enamorarme...
- ¿Por qué?
- Porque pueden destrozarme el corazón
Yo habría pensado un rato... y le habría dado la única respuesta posible:
- Es un riesgo que siempre se tiene que correr.
Oh, oh.
Resiste, Ceci. Recuerda que tus primeras impresiones nunca te han fallado... Hasta ahora.
El corazón no sabe que después el dolor no es sólo suyo, que el dolor recorre el cuerpo, que duelen hasta las venas!
El corazón nunca toma conciencia de que no va sólo, que tiene toda una responsabilidad al rededor, pero es un inconciente y a ratos inconsistente...
órgano traidor
Decirle? Ni loca. A no ser que me gustara muchísimo más. Por ahora, lo correcto es dejar que cicatricen muy bien las heridas pasadas. No se vale entrar a una nueva relación acompañada de tus fantasmas. Es una cosa de respeto mínimo por la otra persona, no creen?
PS : Además y, en buen chileno, « susodicho » no me da ni pelota.
Apostaría lo que quieras a que « susodicho » cree que eres tú la que no está interesada…No sería ninguna novedad que seas la última en enterarte. Cierto?
Cómo tan volada, Ceci!!!
Don't blame only your heart!
All of you think and talk about only one implication: how the heart betrays your mind, but if you would really want to split hairs you should also think of the reverse: how your mind's constraints affect your soul.
I don't think of the heart as of a "organo traidor" but I think that both heart and mind are mutilating each other in this constant fight between desire and reason. This applied not only in love but in a more general way: what we would like to do and what we really do, what we would like to say and what we do say.
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